Materia y energía, cuerpo y mente.. Cada vez la ciencia tiene más claro la relación entre estos pares.
Seguro que nos suena la famosa ecuación de Einstein, dónde se relacionaban: E =mc2 . Sin embargo, en el tema de la salud todavía hay cierta resistencia a asumir esa relación.
Si me duele el cuerpo voy al médico. Si es algo más específico al especialista. Si tengo problemas de ansiedad, tal vez acuda al psicólogo.
y no digo que eso no esté bien, aunque a veces es insuficiente.
Si consideramos que el cuerpo ( materia) es la consecuencia de como están nuestra mente y emociones ( energía), podemos afirmar que muchas de las molestias y malestares que se manifiestan en la corporalidad se originan en otros planos. Por tanto tenemos que tener también en cuenta esos planos para una resolución realmente eficaz, y no sólo alivios pasajeros.
Y esto se traslada también al terreno de la práctica de actividades físicas.
Se suele dar mucha importancia al físico, y a la estética, y se olvida ese componente psicológico y emocional tan importante. Así mismo se entiende que el entrenamiento es algo necesario para el mejoramiento corporal, y no nos damos cuenta que con la mente sucede lo mismo.
Se necesita entrenamiento para adquirir cierta habilidad a la hora de relacionarnos con nuestra propia mente. Esta tiene sus hábitos adquiridos y suele funcionar de forma autónoma, convirtiéndonos en meros espectadores de sus tendencias, ante las que parece que nada podamos hacer.
Hoy en día, tengo la sensación de que incluso dentro del mundo del yoga, se está dando demasiada importancia a la parte física. YouTube se ha convertido en un escaparate de cuerpos en prendas ajustadas, haciendo acrobacias.
El cuerpo es un medio, no un fin. A través de ese medio podemos acceder a determinados estados de conciencia y beneficiarnos enormemente en cuanto a estado de ánimo y tranquilidad mental. Y precisamente gracias a esto muchas funciones del cuerpo se van a ver beneficiadas.
Y por otro lado, no es tan fácil tratar directamente con emociones o psique, sin ese soporte del cuerpo. Algunas terapias psicológicas se quedan cojas, por no tener en cuenta que el cuerpo también es protagonista.
No somos un montón de piezas, sino un conjunto que para funcionar de forma armoniosa ha de tener en cuenta una visión holística ( completa) . Por eso es tan importante la respiración que se convierte en el puente entre materia y energía.
Las técnicas respiratorias ofrecen muchas posibilidades. Desde un simple apaciguamiento, a todo lo contrario , espabilar o levantar el ánimo. Ayudar a centrar la mente, gestionar las emociones de forma saludable. O incluso servir como herramienta de autoconocimiento y sanación .
En el aula te ofrecemos la posibilidad de aprender las técnicas respiratorias básicas dentro de las clases grupales, y en sesiones individuales de respiración consciente conectada. a través de un proceso de acompañamiento y orientación emocional.
Se trata de adquirir herramientas que nos permitan la autogestión del campo emocional. Una vez aprendidas siempre van a estar a tu disposición, pues evidentemente tu respiración va contigo a todos lados.
